En Julio, oh queridos y ojipláticos lectores, vuestro humilde narrador empezó una serie dedicada a los mejores videos de la historia con otros tres queridos compañeros (recordad y visitadles, Breckinridge el Hermoso, Polo el Sabio y Coxis el Chispeante). Serie que aún no se ha continuado por aquello de las vacaciones y tal. Pues ahora le damos la vuelta a la tortilla y vamos con los peores, para vuestro goce y disfrute.
Ya he hablado bastantes veces de mi adoración por Donna Summer. Le debo un post, por supuesto, pero ya sabemos que a veces hay que hacer caso de aquello de "kill your idols" y descubrir las zonas más bajunas de aquellos a quien adoramos. Cuenta la leyenda (porque ella lo desmiente continuamente) que tras la muerte a palos de la música disco por las hordas hetero-rockeras, a esta buena mujer le dió un yuyu que la hizo renegar de su pasado de discodiva y convertirse en una ferviente cristiana ataca-gays, llegando a decir aquello de que el SIDA era un castigo divino (divino de la muerte, le faltó decir a la muy petarda) y blah blah blah. Ella (ahora) lo niega todo, pero sea como sea se corrió la voz, y sus ventas y popularidad menguaron considerablemente. Cambió de discográfica y de estilo, y consiguió un exitazo con "She Works Hard For The Money" en 1983. Al año siguiente editó "Cats Without Claws", cuyo segundo single fue este "Supernatural Love", un tema estupendo a mi parecer con un video espantoso se mire por donde se mire. No tiene desperdicio.
El clip empieza con una especie de Adán (Bruce Sudano, marido por aquel entonces), con retortijones, que se abre las carnes y aparece ella como emporretá (de que va medio en porretas y de que se ha fumado un porro, se le queda mirando con cara de "Qué hago yo aquí? Huy, un hombre, macabodenamorá!!", ) y parece como que se da cuenta de que la están mirando y se pone a hacer su playback desatada perdida. En eso hay una mala pécora que viene borracha del carnaval y se equivocó de parada del bus. Se prenda del Adán y se lo lleva al futuro, como Donna está entregada a su público no se cosca y cuando ve que no está, decide buscarlo. En un alarde de efectos especiales se transforma en paloma y se planta en una fiesta hipercool, se pega un chochazo bestial, y se levanta vestida por su peor enemigo, peinada por el primo del enemigo, y maquillada por el mejor amigo de ambos, y a cantar!
Además, ella es el Amor en sí misma, y tiene como unos polvos mágicos que hacen que la gente se quiera mucho. Hay una muchacha obesa que baila, una china (siempre hay una) que baila, y una sargenta de la marina que baila. Pero Adán, ahora vestido a la última moda de Almacenes Arias, sigue bajo la influencia de la pécora aunque la mira con asombro (normal, con el modelón y los cuernos...) e intenta zafarse. Las tres perracas escoltas de la pécora se enfentan con Donna, oh terror, pero les hace un baile tribal poderosísimo y las deja tontas.Ella le pierde de vista, sube unas escaleras, se lanza al vacío (de nuevo la paloma), se pega otro chochazo tremendo pero consigue plantificarse ante Adán. Le canta con su enamorada mirada estrábica, el Amor triunfa y todos bailan, Donna se lo pasa de puta madre con unos pasos de baile que ni la verbena de VillaCuchifrita, la obesa está encantada de la vida, todos son felices, Adán y Donna vuelven al edén a seguir con su baile verbenero, y el vídeo acaba con un maravilloso plano de Donna, que deja de cantar antes de tiempo, se ve que estaba ya hasta el toto de tanta paloma y tanta fiesta, se pone de espaldas, el director le tuvo que decir, "Niña, que te quedan 3 segundos de canción", y se vuelve a cámara con una naturalidad ingenua y candorosa (y bizca) que ponen fin a este maravillosamente terrible video.
Hay docenas de momentos destacables, pero me quedo con el "Oh" de Adán en 1:00 (bueno, y sus zapatos en 3:05).
¿¿Os (dis)gustó?? ¡¡Volveremos!!
Ya he hablado bastantes veces de mi adoración por Donna Summer. Le debo un post, por supuesto, pero ya sabemos que a veces hay que hacer caso de aquello de "kill your idols" y descubrir las zonas más bajunas de aquellos a quien adoramos. Cuenta la leyenda (porque ella lo desmiente continuamente) que tras la muerte a palos de la música disco por las hordas hetero-rockeras, a esta buena mujer le dió un yuyu que la hizo renegar de su pasado de discodiva y convertirse en una ferviente cristiana ataca-gays, llegando a decir aquello de que el SIDA era un castigo divino (divino de la muerte, le faltó decir a la muy petarda) y blah blah blah. Ella (ahora) lo niega todo, pero sea como sea se corrió la voz, y sus ventas y popularidad menguaron considerablemente. Cambió de discográfica y de estilo, y consiguió un exitazo con "She Works Hard For The Money" en 1983. Al año siguiente editó "Cats Without Claws", cuyo segundo single fue este "Supernatural Love", un tema estupendo a mi parecer con un video espantoso se mire por donde se mire. No tiene desperdicio.
El clip empieza con una especie de Adán (Bruce Sudano, marido por aquel entonces), con retortijones, que se abre las carnes y aparece ella como emporretá (de que va medio en porretas y de que se ha fumado un porro, se le queda mirando con cara de "Qué hago yo aquí? Huy, un hombre, macabodenamorá!!", ) y parece como que se da cuenta de que la están mirando y se pone a hacer su playback desatada perdida. En eso hay una mala pécora que viene borracha del carnaval y se equivocó de parada del bus. Se prenda del Adán y se lo lleva al futuro, como Donna está entregada a su público no se cosca y cuando ve que no está, decide buscarlo. En un alarde de efectos especiales se transforma en paloma y se planta en una fiesta hipercool, se pega un chochazo bestial, y se levanta vestida por su peor enemigo, peinada por el primo del enemigo, y maquillada por el mejor amigo de ambos, y a cantar!
Además, ella es el Amor en sí misma, y tiene como unos polvos mágicos que hacen que la gente se quiera mucho. Hay una muchacha obesa que baila, una china (siempre hay una) que baila, y una sargenta de la marina que baila. Pero Adán, ahora vestido a la última moda de Almacenes Arias, sigue bajo la influencia de la pécora aunque la mira con asombro (normal, con el modelón y los cuernos...) e intenta zafarse. Las tres perracas escoltas de la pécora se enfentan con Donna, oh terror, pero les hace un baile tribal poderosísimo y las deja tontas.Ella le pierde de vista, sube unas escaleras, se lanza al vacío (de nuevo la paloma), se pega otro chochazo tremendo pero consigue plantificarse ante Adán. Le canta con su enamorada mirada estrábica, el Amor triunfa y todos bailan, Donna se lo pasa de puta madre con unos pasos de baile que ni la verbena de VillaCuchifrita, la obesa está encantada de la vida, todos son felices, Adán y Donna vuelven al edén a seguir con su baile verbenero, y el vídeo acaba con un maravilloso plano de Donna, que deja de cantar antes de tiempo, se ve que estaba ya hasta el toto de tanta paloma y tanta fiesta, se pone de espaldas, el director le tuvo que decir, "Niña, que te quedan 3 segundos de canción", y se vuelve a cámara con una naturalidad ingenua y candorosa (y bizca) que ponen fin a este maravillosamente terrible video.
Hay docenas de momentos destacables, pero me quedo con el "Oh" de Adán en 1:00 (bueno, y sus zapatos en 3:05).
¿¿Os (dis)gustó?? ¡¡Volveremos!!