lunes, mayo 07, 2007

Acabar de Acabar


Y digo yo, ¿cuándo tiene un creador la sensación de que su trabajo está terminado? Es algo que siempre me ha intrigado tremendamente. Es verdad que a veces hay presión por parte "del que paga", censura, escasez de medios, y muchas circunstancias que hacen que el autor no pueda decidir libremente dónde poner punto final a su asunto, pero imaginando que se goce de completa autonomía y libertad de decisión, cuándo llega el final? Hay novelas o películas que tienen un final claro, se está contando una historia concreta y el desenlace es lo que le marca el fin. Aunque en realidad todos los finales son abiertos, porque es materialmente imposible contarlo todo. Los protagonistas se enamoran, se besan, y se acaba felizmente. Pero claro, luego viene la vida en común, las alegrías o decepciones, lo mismo uno de ellos podría morir al dia siguiente, o tener una crisis de fe, o abandonarlo todo por el macramé, quién sabe. Pero como la historia que nos estaban contando, que centraba su intriga en saber si se enamoraban o no (o encontraba el arca,o mataba al vampiro, o se hundía el barco, etc.), ya ha llegado al punto preciso, pues se puede dar por contada, y lo demás interesa menos. Muy bien. Pero, qué pasa con historias no tan concretas, que no tienen un asunto tan concluible. ¿Qué lleva al director, guionista o escritor a decidir cortar en un punto? A no contar más de los principales, a no profundizar en los otros personajes. Yo como espectador o lector me puedo quedar con ganas de saber más, pero acepto que me cuenten hasta dónde el contador quiera. Lo que me intriga es el momento en que decide "ea, ya he contado lo que quería".

Y si en el caso del cine, la literatura o incluso la música me parece lógico que el creador "vea" un final, hay disciplinas en las que me siento intrigado hasta no poder más. La poesía moderna, por ejemplo. Una vez superadas las normas métricas y tal, ¿cuándo siente el autor que un verso es el último, que ya ha expresado lo que quería? Hay poemas de los mismos autores que no llegan a los 10 versos y otros que ocupan varias páginas. ¿Qué pasa por su cabeza a medida que escribe para comprender la cantidad de palabras que necesita su idea? ¿Y en la pintura? Los clásicos lo tenían aparentemente más fácil. Pintar con un modelo (una persona o grupo, un bodegón, un paisaje) significa que una vez retratado eso, ya no había más que poner. Aunque habría que preguntarles a ellos, lo mismo les daba igual quebradero de cabeza decidir si el final estaba en esa luz más o menos intensa o en la mirada del retratado, qué sé yo. Pero los modernos...¿dónde sienten el final de una obra? Pollock, por ejemplo, que entraba en trance derramando chorros y goterones (que conste que lo venero)...cuándo decidía que había expresado lo que quería en un cuadro concreto, qué chorro era el último?

Y digo yo, ¿cómo sabe el bloguero que su entrada está completa?
Algo prestado: "Sorry, You're Not A Winner", de Enter Shikari (PIAS, 2006/7)

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues si, tienes toda la razón. ¿Cuando sabemos que algo está listo y terminado? Supongo que cuando hemos contado lo que queríamos contar, aunque queden cosas en el tintero. No es que yo escriba mucho, pero en lo poco que he hecho, creo que el final llega cuando has dicho justo lo que querías decir. En fin... no se si me aclaro o me lío o qué... No sé, no se...
FIN

ABZ

Unknown dijo...

creo que nunca se acaba, puedes pensar que se acabó la obra, pero siempre mirarás que podías haber añadido una luz más, una nota más o menos, haber puesto un jarron en la izquierda, una vela en la derecha y no al revés, pero así fue como se acabó, no se si te enteraras de lo que digo, porque no se si esto es lo suficiente, si he expresado todo lo que quiero decir o puedo seguir escribiendo.................

Anónimo dijo...

Hola, con ordenata prestado. A ver, yo me voy a robar una frase que me resulta bastante buena de un cantante bastante malo: "Todo lo que termina, termina mal".
La respuesta es simple, lo que da placer/gozo/felicidad lo prolongamos eternamente (lo de "eterno" claro, en este caso tiene fecha de caducidad). Voy a contarle que, en el caso, por decir, de los pintores flamencos, ellos realmente nunca acababan un cuadro, el motivo? la pintura al oleo continua moviendose, si, así como lo lee. El aceite nunca se seca del todo y el barniz que le hechaban arriba colaboraba a ese movimiento bajo la superficie. Curioso, verdad? pero se ha constatado que hay cuadros de mas de 500 años que continuan en "movimiento". Las poesias tienen temas recurrentes, y cada "recurrencia" es para completar una idea, para alargar la expresión del lenguaje. Por que sino tantos libros con ediciones "revisadas", "Ampliadas", etc. Lo mismo con las versiones de canciones, los remasterizados, las remezclas ... etc.
Respecto a Pollock yo tengo una idea más "romantica" sobre él, aunque fuese un cretino de los grandes, que lo era. Sabe que Lee Krasner, quien fuera su mujer se llamaba Lena? y que nació el mismo día que Sylvia Plath y yo misma? ellas varios años antes que mi persona, claro, pero a mi es algo que siempre me ha gustado, excepto por el detalle de vivir a la sombra de un hombre "exitoso", a mi para sombra dejeme una palmera. besos.

El Cinéfilo Ignorante dijo...

El comentario de los pintores flamencos es muy chulo. Claro que no lo habría leído sin haberme metido en el post original. Y es de un tema al que tampoco termino de darle vueltas. No se acaba ni el poema de 10 líneas; no sólo porque el Juan Ramón Jiménez de turno lo toque, lo retoque y haga anotaciones impulsado tanto por la estética como por sus vivencias, sino porque las experiencias vitales (temporales y personales de cada observador) lo cambian... Parece enrevesado, pero lo veo así. También se decía en Alicia en el país de las maravillias que hay que estar en constante movimiento para que las cosas sigan igual.

theodore dijo...

Ooops! Alicia! Creo que alguien (se) ha sonreido al leer ello. Geniales comentarios todos, gracias por leerme y comentarme, he dicho alguna vez que me hace mucha ilusión? Y lo de epp realmente me ha dejado impresionado, claro que ya se va convirtiendo en una (excelente) costumbre. Se ve que el 27 de Octubre es un día mágico.

theodore dijo...

Y por cierto, pertenece Lola Flores a los pintores flamencos? :-)

Anónimo dijo...

puf! no podia dejar mensaje, a ver ahora. Lo de Alicia, me encanta, claro :).
Lola Flores pertenece a la escuela flamenca, claro, no ha visto lo brillante de sus colores?

sardinita dijo...

le daba al pollo por revolcarse en la pintura y to felíz él,
será cuestión de revolcarse en las frases, tengan sentido o no, hasta que te hartas y luego te sientes mejor,
paranoya-sardina
muak

Adrianos dijo...

ooohhh preciosa frase la de "todo cambia para que todo siga igual" y que buenos los comentarios aquí...

dejé mi "analysis" ;-P en la re-publicación de la entrada pero no me he resistido pasar por aquí (y como me alegro haberlo hecho la verdad que los comentarios son buenisimos)

2007_Besos